Manila, Elogio del Caos
on Lunes, 23 Mayo 2016.
Manila es mil ciudades en una. O dos planetas en uno.
La belleza de lo exótico y la miseria de la realidad más cruda. La herencia española, británica, árabe, estadounidense, china y japonesa, con sus cementerios y santuarios; mezquitas y prostíbulos; su oligarquía sofisticada y sus vertederos urbanizados. Manila es mucho más que una ciudad. Son 12 millones de habitantes en un escenario único.
Manila es mucho más que una gran metrópolis, es una úrbe donde conviven dos mundos independientes “Los de la parte pobre saben que no pueden pasar a la parte rica. Los muros son invisibles, pero están”
En Makati están los edificios financieros, el Instituto Cervantes y centros comerciales como Green Belt, donde esta vez se funden premeditadamente vegetación y arquitectura. La élite compra bolsos de marca y pasea sus huskys siberianos
Quiapo es el núcleo de la vida cultural y religiosa, junto a la iglesia del Nazareno Negro, las mujeres venden pócimas abortivas, velas y collares. Al lado de bellas construcciones modernistas proliferan chabolas de cuatro plantas.
También los cementerios de Manila son famosos: el chino, el americano, el Paco, que es circular y da cobijo a familias que tienden los calcetines en una cuerda, los colores de las tiendas de chancletas, los niños desnudos que juegan a lo que juegan todos los niños del mundo.
Intramuros: el fuerte de Santiago, con sus vistas al río Pasig y las huellas de Rizal que se encamina hacia el lugar de su fusilamiento; la iglesia de San Agustín; en Casa Manila, los tapices de madreperla dejan pasar la luz, pero no el calor. Casa Manila, junto con otras dos casas coloniales, forma el complejo de San Luis
La periodista Marta Sanz, escribe este interesante artículo para describir los contrastes y el caos de la ciudad de Manila, la antigua perla de oriente que se ha convertido a día de hoy en mil pequeñas ciudades independientes que se dividen por el nivel de riqueza de la población que habita en cada una de ellas.